A esta hora presento una letra poco cargada, con ruido sereno. “El escritor se define dependiendo del estruendo en su entorno; cuan más intenso, se torna perverso” EG.
Muchas personas afirman la realidad en esa
extraña concepción, ese caos escrito denominado manual de la vida. A cada ser
humano le es concebido el don de tomar decisiones propias. Vivir no es
seguir pautas, no se trata de oír/leer opiniones ajenas, tampoco de inquietarse
y estancar el proceso vivencial; sino del disfrute de momentos llenos de juicos
particulares.
Solo tú tienes el poder de cambiar,
modificar, alterar, desarrollar y planificar; nada es como observamos y nada
como debería.
En lo personal, ¿Qué son las malas decisiones? Nos enseñaron que se encuentra lo
bueno y lo malo, lo positivo y negativo, lo correcto e incorrecto… Si no lo
vivimos de nada nos sirve conocer la teoría. Porque el aquí significa consumir,
probar y tener en cuenta las medidas de supervivencia, (te aseguro que a pocos
se lo enseñaron).
“Trato de explicar un tema confuso: No
decido para complacer. Porque es la perspectiva de cada quien, lo que para mí
es satisfactorio, para el necio es fastidioso y comprendo, no lo obligo a
seguir, ¡Mi ritmo es único y descontrolado! Necesito muchos escenarios porque
mi inspiración es tardía y cuando hace acto de presencia, promete reventar, pero
no causar lidia”.
-
EG.
Quiero más de ti, más de mí, más de una
simple declaración. Una demostración simple que exponga:
- Lo tranquilo en lo
complicado.
- Paz en medio de la
tormenta.
- Felicidad en el
sacrificio.
- Poder ante una derrota.
De esto se trata, de seleccionar el
momento ideal sin sentir pánico; porque sinceramente no es considerado una mala
decisión, solo una determinación de lo que nos toca vivir para aprender y saber
cómo responder.
“El aprendizaje no fue inventado,
alteraron un pensamiento y esto obtuvieron, un rotundo parlamento pesado”.
-
EG.
PSDT:
Se puede respirar en el mundo de la anarquía y en el de felicidad, causarnos pesadez.
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